GET-Viento triste. Primera parte (2014)

GET- Viento triste. Segunda parte (2014)

viernes, 25 de septiembre de 2015

Pleonasmo


El pleonasmo es una figura retórica que consiste en utilizar intencionalmente palabras innecesarias que no añaden nada nuevo a la comprensión del mensaje:

¡Cállate la boca! "la boca" ya está implícito en la orden "cállate"

Ya ejecuté, gran señor, tu justicia justa y recta → es un pleonasmo ya que la justicia siempre es justa y recta.

Salió volando por los aires

Sí señor juez, lo vi con mis propios ojos

Hundida en el silencio de un desierto sin agua

Y yo te quiero besar, besar tus labios de caramelo

Está escrito de mi puño y letra

Lo he pintado con mis propias manos

¡Salga afuera inmediatamente!

Se lo vuelvo a repetir por última vez

Lo que no puede ser, no puede ser y además, es imposible

Ciego que nada ve, ¿quiere hacer una merced?...

Mal o peor has de callar la boca, que no estás en tu casa

Me sorprendió lo completamente abarrotado que estaba el centro comercial

Temprano; madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo
(Miguel Hernández)


Bésame con besos de tu boca

¡... qué lejos siempre de ti mismo!
(Juan Ramón Jiménez)

Allí arriba en aquel cerro
hay un lindo naranjel
que lo cría un pobre ciego,
pobre ciego que no ve


Cuando, Señor, nos besas con tu beso...
(Miguel de Unamuno)


Logró crear una réplica exacta del original


Personificación


La personificación o prosopopeya es una figura retórica que consiste en atribuir cualidades o acciones propias de seres humanos a animales, objetos o ideas abstractas:

La naturaleza es sabia → la sabiduría es una cualidad humana

En la lona gime el viento al viento se le atribuye una acción humana

Las estrellas nos miraban
mientras la ciudad sonreía
(P. del Castillo)


El auto se quejaba adolorido por los años.

El tren tose asmáticamente por la ladera

El árbol con sus manos, peinaba a su novia sauce.

Los invisibles átomos del aire
en derredor palpitan y se inflaman. 
(Bécquer, Rimas)

La ciudad era rosa y sonreía dulcemente. Todas las casas tenían vueltos sus ojos al crepúsculo. Sus caras eran crudas, sin pinturas ni afeites. Pestañeaban los aleros. Apoyaban sus barbillas las unas en los hombros de las otras, escalonándose como una estantería. Alguna cerraba sus ojos para dormir y se quedaba con la luz en el rostro y una sonrisa a flor de labios.
(Rafael Sánchez Ferlosio)

Vetusta, la muy noble y leal ciudad, corte en lejano siglo, hacía digestión del cocido y de la olla podrida, y descansaba oyendo entre sueños el monótono y familiar zumbido de la campana del coro, que retumbaba en lo alto de la esbelta torre en la Santa basílica.
(Leopoldo Alas, «Clarín». La Regenta)

Vino, primero, pura,
vestida de inocencia.
Y la amé como un niño.
Y se quitó la túnica,
y apareció desnuda toda…
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!
(Juan Ramón Jiménez)


En un principio el conejo mostraba alguna desconfianza, pero tan pronto advirtió que los pequeños se aproximaban para llevarle alimentos se ponía de manos para recibir las hojas de berza y aun las comía delante de ellos. Ya no le temblaban los costados si los niños le cogían, y le gustaba agazaparse al sol, en un rincón, cuando Juan le sacaba de la cueva para airearse.
(Miguel Delibes, "El conejo")


Paralelismo


El paralelismo es una figura retórica que consiste en la repetición de una misma structura gramatical.


Tu frente serena y firme, tu risa suave y callada
tu frente ↔ tu risa
serena y firme ↔ suave y callada 


Errado lleva el camino
errada lleva la guía.
(Romancero Clásico)


Que los gritos de angustia del hombre los ahogan con cuentos
que el llanto del hombre lo taponan con cuentos.
(León Felipe)


Y la carne que tienta con sus frescos racimos
y la tumba que aguarda con sus fúnebres ramos.
(Rubén Darío)


Por lo visto es posible declararse hombre.
Por lo visto es posible decir No.
(Jaime Gil de Biedma)


Si al mecer las azules campanillas de tu balcón
crees que suspirando pasa el viento, murmurador
sabe que, oculto entre las verdes hojas, suspiro yo.
(Gustavo Adolfo Bécquer, “Rima XVI”)


Que te amo con el alma
que te quiero con el corazón.
Popular


Más allá de la vida
quiero decírtelo con la muerte;
Más allá del amor,
quiero decírtelo con el olvido.
(Luis Cernuda, Los placeres prohibidos)


La tierra más verde de huertos
la tierra más rubia de mies
las tierra más roja de viñas.
(Gabriela Mistral)


A ella, como hija de reyes
la entierran en el altar;
a él, como hijo de condes,
unos pasos más atrás.
(Anónimo)


Metonimia


La metonimia es una figura retórica que consiste en designar una cosa o idea con el nombre de otra con la cual existe una relación de dependencia o causalidad (causa-efecto, contenedor-contenido, autor-obra, símbolo-significado, etc.)

Causa por efecto

Le hizo daño el sol el calor del sol


Efecto por la causa

Carecer de pan carecer de trabajo


Contenedor por contenido

Tomar una copa tomarse el contenido de una copa

Se comió dos platos comerse el contenido de dos platos

Fumarse una pipa fumarse el contenido de una pipa

Bebió un vaso de agua el contenido del vaso


Símbolo por cosa simbolizada

Juró lealtad a la bandera jurar lealtad al país

La media luna dominó España los musulmanes


Autor por obra

Un picasso un cuadro de Picasso

En el museo hay varios Rubens cuadros de Rubens

Leyó a Virgilio → una obra de Virgilio


El instrumento por el artista

La mejor pluma de la literatura universal es Cervantes.


Lugar por lo que en él se produce

Un riojaun vino de Rioja

Un jerez un vino de Jerez de la Frontera


Objeto poseído por poseedor

El primer violín de la orquesta se refiere al que toca el violín


La materia por el objeto

Un lienzo un cuadro


El nombre del objeto por el de otro contiguo a él

El cuello de la camisa


Metáfora



La metáfora es una figura retórica que consiste en identificar un término real (R) con otro imaginario (I) existiendo entre ambos una relación de semejanza:


Tus cabellos de oro el término real "cabellos" se asemeja al imaginario "oro" por su color dorado (rubio).



Metáfora Simple o Impura R es I

El tiempo (R) es oro (I) → se asemejan porque ambos son muy valiosos

Tus dientes (R) son perlas (I) → se asemejan por su color blanco

Tus ojos (R) son dos luceros (I) → se asemejan por su brillo

Tus labios (R) son rubíes (I) → se asemejan por su color rojo

Su nombre es Dulcinea...  sus cabellos son oro, su frente campos elíseos, sus cejas arcos de cielo, sus ojos soles, sus mejillas rosas, sus labios corales, perlas sus dientes, alabastro su cuello, mármol su pecho, marfil sus manos... (Miguel de Cervantes, Don Quijote de la Mancha)


Metáfora Implícita o Pura El término real (R) se omite

Las perlas (I) de tu boca (el término real es "dientes")

El blanco algodón (I) que surca el cielo (el término real es "nubes")

El tambor de tu pecho (I) delata tus nervios (el término real es "corazón")

Está en la flor de la vida (I) (el término real que se omite es "juventud")

Navega (I) por Internet (el término real omitido es "desplazarse por la red")


Metáfora Aposicional R, I

Tus dientes (R), perlas (I) de tu boca

Tus labios (R), pétalos perfumados (I)

Tus ojos (R), negra noche (I)

La primavera (R), niña errática y desnuda (I)


Metáfora de Complemento Preposicional del Nombre → R de I, I de R

Brazos (R) de acero (I)

Dientes (R) de perlas (I)

Voz (R) de terciopelo (I)

El atardecer (I) de la vida (R)

Ríos (I) de lágrimas (R)


Metáfora Negativa → No I, R

No es el infierno (I), es la calle (R)


Metáfora Impresionista R, I, I, I

Tus dientes (R), marfil (I), blancura (I), destellos de sol (I)...

Tus ojos (R), luceros (I), gotas de mar (I), ventana del alma (I)...


Metáfora Continuada o Superpuesta R es I1; I1 es I2; I2 es I3...


Los dientes (R) son perlas (I1); las perlas (I1) son pétalos de margarita (I2): los pétalos de margarita (I2) son alas de mariposa (I3)

Hipérbole


La hipérbole es una figura retórica que consiste en exagerar la realidad.
  

¡Eres más lento que una tortuga!


Llueve a cántaros


Tengo tanto sueño que podría quedarme dormido aquí de pie


Te llamaré un millón de veces


Te mando infinitas gracias


Te bajaré la luna y las estrellas a tus pies


¡Lo sabe todo el mundo!


¡Tienes un corazón tan grande que, no te cabe en el pecho!


Por doler me duele hasta el aliento.
(Miguel Hernández)


Por tu amor me duele el aire, el corazón y el sombrero
(Federico García Lorca)


Las más veces me entrego, otras resisto
con tal furor, con una fuerza nueva,
que un monte puesto encima rompería
(Lope de Vega, “Soneto XXVI”)


Érase un hombre a una nariz pegado
(Francisco de Quevedo)


Yace, en esta losa dura
una mujer tan delgada
que en la vaina de una espada
se trajo a la sepultura"
(Baltasar del Alcázar)


No hay extensión más grande que mi herida
(Miguel Hernández)


Señor excelentísimo, mi llanto
ya no consiente márgenes ni orillas:
inundación será la de mi canto
(Francisco de Quevedo)


Devoró libros, pasto del alma (Baltasar Gracián en referencia al Quijote)


El dictador [...] cuyo poder había sido tan grande que alguna vez preguntó qué horas son y le habían contestado las que usted ordene mi general… 
(Gabriel García Márquez)


Con mi llorar las piedras enternecen
su natural dureza y la quebrantan;
los árboles parece que se inclinan;
(Garcilaso de la Vega, “Égloga I”)


Hipérbaton


El hipérbaton, es una figura retórica que consiste en alterar el orden lógico de las palabras de una oración:


Volverán las golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar Lo lógico sería: "Las golondrinas volverán a colgar sus nidos en tu balcón".

De verdes sauces hay una espesura → Lo lógico sería: "Hay una espesura de verdes sauces"
(Garcilaso de la Vega)


Del salón en el ángulo oscuro
de su dueña tal vez olvidada
silenciosa y cubierta de polvo
veíase el arpa
(Gustavo Adolfo Bécquer, “Rima VII”)


Con tanta mansedumbre el cristalino
Tajo en aquella parte caminaba
que pudieran los ojos el camino
determinar apenas que llevaba
(Garcilaso de la Vega, “Égloga III”)



Pasos de un peregrino son, errante,
cuantos me dictó versos dulce Musa
en soledad confusa,
perdidos unos, otros inspirados
(Luis de Góngora, Soledades)



Donde espumoso el mar siciliano
el pie argenta de plata al Lilibeo
pálidas señas cenizoso un llano
del duro oficio da
(Luis de Góngora, Soledades)



Pidió las llaves a la sobrina del aposento...
(Cervantes, Don Quijote)


A Dafne ya los brazos le crecían...
(Garcilaso de la Vega)

 



 

Ejemplos de Hipérbaton en el Lenguaje Cotidiano:


Si mal no recuerdo (lo lógico sería: "Si no recuerdo mal")


A Dios gracias (Gracias a Dios)


Bien está (Está bien)


Ni que decir tiene (No se tiene que decir)


Miedo me da lo que va a hacer (Me da miedo lo que va a hacer)


Mal lo veo (Lo veo mal)


Atónito me dejas (Me dejas atónito)

Enumeración


La enumeración es una figura retórica que consiste en la acumulación de palabras.


Ascendente (o Clímax)  →  las palabras se ordenan de menor a mayor según un criterio de importancia o relevancia:

Aspiro siempre a lo bello, lo perfecto, lo sublime...


Descendente (o Anticlímax) → las palabras se ordenan de mayor a menor según un criterio de importancia o relevancia:

En tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada


¿De qué sirve sembrar locos amores,
si viene un desengaño que se lleva
árboles, ramas, hojas, fruto y flores?


Simple → las palabras se disponen para describir las partes de un todo:

Lo definió sincero, noble, altivo...


Era mentiroso, bebedor, ladrón,
tahúr, peleador, goloso,
reñidor y adivino, sucio,
necio y perezoso, tal es mi escudero…
(Juan Ruiz, Libro de Buen Amor)


Caótica enumeración de palabras que no guardan entre sí ninguna relación:

Todo lo recordó: el mar, la carta, el beso y las estrellas.
Jacintos, ángeles, bibliotecas, laberintos, anclas, Uxmal, el infinito, el cero
(Jorge Luis Borges)


jueves, 24 de septiembre de 2015

Elipsis




La elipsis, es una figura retórica que consiste en omitir voluntariamente elementos de la oración que se sobreentienden por el contexto:

Lo bueno, si breve, dos veces bueno  se omite el verbo "ser" (Lo bueno, si es breve, es dos veces bueno)

A enemigo que huye, puente de plata → se omite el verbo "poner" (a enemigo que huye ponedle puente de plata)

En abril, aguas mil  se omite el verbo "caer" (en abril caen aguas mil)
Refranero Popular


A los árboles altos los lleva el viento, y a los enamorados el pensamiento
(Cancionero)

Con estas y con otras leyes y estatutos
nos conservamos y vivimos alegres;
somos señores de los campos, de los sembrados, 
de las selvas, de los montes, de las fuentes, de los ríos
los montes nos ofrecen leña de balde, los árboles frutos;
las viñas uvas.
(Miguel de Cervantes)


Yo llevaba flores y ellos, el incienso  se omite el verbo "llevar" (yo llevaba las flores y ellos llevaban el incienso)


Felix cantaba una canción romántica y sus amigos, (cantaban) unos boleros.


La (hora) del alba sería.
(Miguel de Cervantes)


Yo llevaba las flores y ellos (llevaban) el incienso.


Año de nieves, año de bienes


Nuestro teatro - Viento triste (2013)